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Una vida inconveniente


Con el fin de lograr un debate público bien informado es imprescindible conocer las verdaderas razones que llevan a una mujer a abortar. De esta manera se podrán poner en práctica políticas que permitan manejar embarazos en circunstancias inconvenientes sin terminar con vidas de inocentes.
Se han publicado múltiples estudios sobre este tema a lo largo de los años, y los resultados obtenidos se han presentado de manera consistente. En este artículo resumo investigaciones llevadas a cabo a lo largo de varias décadas en Estados Unidos, donde el aborto es legal desde 1973 a partir de un caso de embarazo por violación, que luego probó ser una denuncia falsa. Sin embargo, el aborto se mantiene como una potestad de la mujer, alegando que el derecho de la madre sobre su cuerpo es superior al derecho a la vida que tiene el hijo dentro de su vientre.
El estudio “Mujer y Aborto: Actitudes, Relaciones Sociales, Toma de Decisiones” publicado en 1985 por la revista Social Work in Health Care, analizó a mujeres que abortaron en dos clínicas de aborto y una “agencia de planificación familiar” poco más de una década después de que el aborto fuese legalizado en EEUU. La razón más frecuente que dieron las encuestadas para tener un aborto fue la falta de preparación para ser madre. Recursos económicos insuficientes para tener un hijo en ese momento fue la siguiente categoría más importante. El tercer motivo más repetido fue el no tener una pareja.
La revista Family Planning Perspectives publicó en 1988 el estudio “Por qué las Mujeres tienen Abortos”. Todas las mujeres encuestadas fueron pacientes de 30 “proveedores deservicio de abortos”. El 100% dijo que habían tenido más de una razón para decidirse a abortar (casi todas mencionaban en promedio cuatro razones). Las tres cuartas partes de las mujeres de la muestra dijeron que tener un bebé interferiría con su trabajo, estudios u otras responsabilidades. Aproximadamente dos tercios dijeron que no podían económicamente permitirse tener un hijo en ese momento, y la mitad expresaron que no querían ser madres solteras o que tenían problemas de relación. En casos de adolescentes fue más frecuente que alegaran que no eran lo suficientemente maduras o que sus padres querían que abortaran.
 “Razones por las que mujeres americanas tienen abortos: Perspectivas Cuantitativa y Cualitativa” es un estudio del Instituto Guttmacher, publicado en el 2005. La investigación concluyó que las causas para decidir tener un aborto son múltiples y están frecuentemente relacionadas. La principal causa reportada fue que el embarazo o nacimiento del hijo interfería con la educación de la madre (sin diferenciar entre colegial y universitaria), su trabajo o su capacidad para atender a quienes ya dependían de ella (74% de los casos). La segunda razón fue económica, alegando que no podían mantener a un hijo en ese momento (73%). La tercera fue que no querían ser madres solteras o que estaban teniendo problemas en su relación de pareja (48%).
El estudio publicado en 2013 por BMC Women´s Health con el título “Comprendiendo por qué las mujeres buscan abortos en EEUU”, se hizo sobre la base de una investigación longitudinal de mujeres atendidas a lo largo de 5 años en 30 instalaciones que realizaban abortos. Los examinadores concluyeron que las causas para buscar un aborto son complejas e interconectadas, y que habían encontrado resultados similares a los de estudios anteriores. La principal causa para solicitar un aborto fue tener dificultades financieras (40%), en segundo lugar alegaron que era un mal momento para tener un hijo (36%), en tercer lugar dijeron que tenían problemas relacionados con la pareja (30%) y en cuarto lugar mencionaron la necesidad de ocuparse de sus otros hijos (29%).
De acuerdo con todos los estudios revisados, las causas presentadas para abortar pueden agruparse en una sola categoría: condiciones inconvenientes para la mujer embarazada. El hecho de que el embarazo o el nacimiento de un hijo se presente en un momento inconveniente le cuesta la vida al niño. Ante esta situación, enfrentamos dos opciones. La primera es abrir las puertas al aborto para terminar con vidas inocentes cuando los embarazos se presentan en condiciones inconvenientes. La segunda es dar el apoyo necesario a las mujeres, para que puedan completar su embarazo y se mantengan adecuadamente integradas a la sociedad. Todo con el objetivo de salvar la vida del niño, que podrá permanecer con su madre o ser recibido en adopción. Una vida no debe ser terminada por presentarse en un momento inconveniente.